¿Cómo es el prototipado de un producto?

Una de las formas más comunes de mostrar un producto y poder estudiar su viabilidad antes de fabricarlo, y poder conocer así todas sus especificaciones técnicas, es fabricando un prototipado de producto.  

Pero antes de llevar a cabo su construcción, es necesario conocer las necesidades del cliente, así como también determinar el tipo de prototipo que se ajuste mejor a cada caso. En esta ocasión, desde BSDI, como expertos en desarrollo de productos, te explicamos detalladamente en qué consiste un prototipo, mostrándote algunos ejemplos para que puedas comprender mejor cómo funcionan. 

¿Qué es un prototipo de producto? 

Los prototipos son un modelo de un producto, a menudo utilizado como una primera muestra. También se puede tratar de una versión mejorada del mismo, en la que se agregan nuevas características con el objetivo de visualizarlas o verificar su funcionamiento. Los prototipos son sometidos a pruebas antes de ser llevados al mercado, lo que permite comprobar la viabilidad del proyecto por anticipado. 

Además de eso, pueden ayudar a definir ideas fundamentales para el producto, así como también demostrar que funcionan adecuadamente y que cumplen los estándares del mercado. En este sentido, verificar el producto antes de ser fabricado puede mejorar la experiencia del usuario, de manera que su éxito esté totalmente garantizado.   

Tipos de prototipos  

Dicho esto, no todos los prototipos son iguales. Existen diferentes formas de fabricar el prototipo de un producto, siendo las más comunes:  

  • Prototipo de baja fidelidad: en este tipo de prototipo se observan aspectos generales del producto sin incluir ningún detalle. Son baratos y su construcción es rápida y sencilla, por lo que no requieren de técnicos expertos para su fabricación. 
  • Prototipo de alta fidelidad: sirven para representar detalles precisos del producto.  Aquí ya se pueden visualizar funcionalidades de la pieza, es interactivo y se fabrica pensando directamente en el usuario. Su aspecto es semejante al producto final y, por lo general, su coste es mucho mayor. Con este prototipo se valida la usabilidad de toda la pieza.  

¿Cómo hacer un prototipo? 

Para fabricar prototipo es necesario llevar a cabo diferentes etapas. La primera de ellas es comprender el problema del cliente y conocer las necesidades que se desean cubrir con el producto o servicio.  

Lo segundo es determinar una solución al problema para luego proseguir con la elaboración del prototipo. Aquí se determinan las herramientas y materiales que se van a usar durante el proceso de fabricación.  

La tercera fase del prototipado de un producto consiste en realizar las pruebas pertinentes al prototipo, estudiarlo y extraer las primeras impresiones acerca del producto. Gracias a esto, se puede conocer si la idea inicial es viable o si debe ser reformulada.  

La última fase trata de la optimización del prototipo. En este caso, ya se sabe lo que funciona y lo que no, por lo que es momento de perfeccionar el producto hasta obtener la mejor versión del mismo.  

Ejemplo de un prototipo de un producto  

Pueden tener distintas formas y tipos. Algunos de ellos se crean sencillamente para representar el funcionamiento o la apariencia de un producto al cliente, mientras que otros sirven para mostrar su versión miniatura, incluida la funcionalidad parcial o total.  

Como ejemplos de prototipos podemos mencionar varios. El primero es el prototipo de papel, es desechable y se crea a partir de bosquejos a mano de la interfaz del producto, diseño frontal e incluso en ocasiones del producto final.  

También está el prototipo de impresión 3D, con el cual es posible observar si el producto puede funcionar. Por otro lado, se encuentra el prototipo digital con el que los desarrolladores crean un modelo virtual del producto, que les permite observar su funcionamiento y explorarlo de manera virtual antes de fabricarlo. Para terminar, está el modelo a escala, el cual es un modelo pequeño y no funcional, que normalmente se emplea como prototipo de edificios, automóviles, entre otros.  

Del prototipo al producto final  

Lo cierto es que pasar del prototipo al producto final en muchos casos puede ser un proceso abrumador, en especial para los principiantes en el sector fabricación. Enn función del tipo de producto, el método para crear su prototipado será uno u otro. Además, si un proceso funciona para un producto en específico que ya está en el mercado, no quiere decir que sirva para otro.  

En el proceso de fabricación del prototipo se llevan acabo distintas fases, empezando por el desarrollo de la idea, a la cual le sigue la creación de un dibujo sencillo, al que posiblemente se le realicen modificaciones. Después de estas fases sigue el desarrollo de un modelo 3D del diseño dibujado.  

Una vez realizado el modelo, hay que comprobar si es funcional o no, y si cumple con las exigencias iniciales. Esta fase puede llegar a repetirse varias veces hasta conseguir tanto la forma como la funcionalidad óptima del producto.  Lo que resta es decidir el volumen de productos que se desean fabricar y comenzar el proceso de producción. 

El desarrollo de prototipos ha experimentado grandes cambios, pero los principios son los mismos. En la actualidad se utilizan técnicas revolucionarias como la impresión 3D, las cuales consiguen reducir tanto los costes como el tiempo de fabricación. 

En BSDI usamos impresión 3D, también llamada fabricación aditiva (rapid prototyping), con la cual desarrollamos artículos de metal, cerámica o plástico. Realizamos prototipos estéticos o modelos a escala y prototipos funcionales, garantizando a nuestros clientes rapidez y servicio integral y técnicas adaptadas a las necesidades de cada uno de ellos.  

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